¿Te gustaría tener una hamaca para poder disfrutar de la brisa del verano y de las noches estrelladas? ¿Qué tal si mejor la confeccionas tú desde el principio? En este artículo queremos darte las claves para que diseñes una hamaca por tu cuenta, concretamente te explicamos cómo tejer una hamaca de red de manera sencilla y sin complicaciones. ¡Presta atención a los pasos que te explicamos, a continuación!
Tejidos de hamacas
Uno de los tejidos más populares en el mundo del diseño y la fabricación de las hamacas es la red. Las hamacas de red son aquellas que están confeccionadas con forma de malla —o de red, como su nombre indica—. Ahora bien: ¿De qué material es esta red? El tejido empleado para confeccionar la red es el algodón con forma de cuerda que, a su vez, es otro de los materiales más comunes en el mundo de la hamaca. Los hilos de nylon para tejer hamacas son, por otro lado, otro de los materiales más utilizados para confeccionar hamacas. Aunque se utilizan en mayor medida para hamacas multiaventura o de invierno, ya que es un material aislante. Otro de los tejidos más comunes es el poliéster (este también lo podemos encontrar en hamacas hechas de cuerda, aunque con menor presencia). Por último, nos encontramos con la seda de paracaídas, que resulta ultraligera y ocupa muy poco espacio. Resiste a las roturas y es muy confortable y suave. Ideal para viajar con hamacas.
Cómo tejer una hamaca de red
Lo primero de todo, antes de responder a cómo tejer una hamaca de red, es elegir el material que vamos a emplear (ya hemos visto que para este tipo de hamacas podemos hacer uso de algodón en forma de cuerda o poliéster). También será necesario equiparse con una barra fina de madera (o varilla) que se utilizará como soporte para confeccionar la hamaca de red y una varilla de medición para realizar correctamente los nudos. Por supuesto, debes tener una lanzadera de tejer para poder comenzar con el proceso y trabajar la cuerda. Te explicamos, paso a paso, lo que debes hacer.
1. Utiliza una lanzadera de tejer media
Emplea una lanzadera media de tejer y enrolla el hilo en ella hasta que esté llena. Escoge una herramienta que te permita trabajar con cuerdas de una dimensión de 5 a 10 metros. La lanzadera volante, como también se le conoce, consiste en un mecanismo de palancas que empuja la guía por una pista fabricando tejidos más anchos en el campo de acción del brazo humano.
2. Envuelve dos veces alrededor de la varilla de medición
Lo siguiente que debes hacer es envolver dos veces la cuerda a través de la varilla de medición. A continuación, ata firmemente y después vuelve a atar de nuevo. Seguidamente, desliza el bucle y cuelga el nudo en un clavo.
3. Estira hacia abajo con fuerza
Una vez atada la varilla de medición, estira con fuerza hacia abajo desde el segundo nudo.
4. Pellizca y mantén apretado mientras se hace el nudo
Tal como puedes ver en la imagen, pelliza y mantén apretada la varilla mientras se hace el nudo.
5. Vista oculta del número 4
Como puedes observar, esta es la vista oculta del número 4. Fíjate bien cómo se hace el nudo y por dónde debe pasar la lanzadera de tejer (o lanzadera volante) para obtener el resultado que deseas, ya que en caso contrario el nudo no se deslizará y tendrás que repetir el proceso.
6. Continúa apretando con el pulgar y el dedo índice
Lo siguiente que debes hacer es continuar apretando con el pulgar y el dedo índice de tu mano izquierda mientras el nudo se asienta. Al mismo tiempo, con la mano derecha debes tirar del hilo hacia fuera y luego hacia abajo. Con ello conseguirás crear el primer nudo completo a partir del cual podrás seguir trabajando.
7. Nudo correcto
El nudo correcto sella las dos cuerdas de manera envolvente, facilitando el tejido para continuar con los siguientes puntos.
8. Nudo incorrecto
El nudo incorrecto no sella correctamente las dos cuerdas a la hora de crear la primera esquina de la red. Es importante que mientras aprietas no dejes que el nudo se deslice por debajo de la “V” que debe crear.
9. Haz una cadena de mallas de inicio
Lo siguiente que debes hacer es una cadena de mallas de inicio realizando nudos como en el número 4. Después de cada nudo, saca el palo de medición y haz otro como el que se muestra en la imagen. Debes enderezar las mallas tirando con los dedos en la dirección en la que muestran las flechas. Es decir, hacia tu lado derecho e izquierdo para extenderlas.
10. Coloca la red en una varilla de madera
El siguiente paso que debes hacer es colocar la red en una varilla desde el extremo que has creado. A partir de este momento comenzarás a trabajar hacia abajo, no de manera vertical. Fíjate en la imagen para ver cómo debes continuar.
11. Continúa con las siguientes filas
Una vez que hayas enhebrado las mallas iniciales en una varilla rígida, comienza con la siguiente fila (como se muestra en la figura 2). Debes pinchar en el punto “B” y atar exactamente como se muestra en las figuras 4, 5 y 6. Así mismo, mantén el hilo apretado en la varilla de medición. Las mallas recién hechas deben dejarse en el palo de calibrador hasta que se abarroten, después desliza un poco. Al final de la hilera saca el palito de medición, gira la varilla de un extremo a otro y vuelve a empezar el proceso. Recuerda tirar de los nudos con fuerza.
Los detalles de la hamaca: la varanda y los puños
Son muchos los modelos comerciales de hamacas que podemos encontrar con la varanda y los puños hechos a mano. Además, estos detalles quedan estupendamente y te permiten diseñar una hamaca con un estilo único y personal. Si todavía te encuentras con ganas de seguir tejiendo, te recomendamos que para complementar los detalles de tu hamaca —ahora que ya sabes cómo tejer una hamaca de red— optes por el estilo macramé. Este es muy fácil de confeccionar, la base consiste en crear tejidos con nudos decorativos que pueden combinarse o no entre sí para crear diferentes diseños.